Wednesday, October 14, 2009

HIPERADRENOCORTICISMO (CUSHING) CANINO. DIAGNÓSTICO HORMONAL



El hiperadrenocorticismo (HAC), o Enfermedad de Cushing, se asocia con el exceso en la producción o en la administración de glucocorticoides (cortisol y afines) y es una de las endocrinopatías más comúnmente diagnosticada en el perro; siendo a su vez, rara en el gato. Aproximadamente el 80% de los perros con HAC padecen de la forma hipofisiario-dependiente de la enfermedad. El restante 20% padece de la forma adrenal-dependiente.

ANÁLISIS HORMONALES
Un diagnóstico presuntivo de hiperadrenocortisismo se puede hacer mediante los signos clínicos, el examen físico, los exámenes de laboratorio y los diagnósticos por imagen. No obstante, el diagnóstico debe ser confirmado por los análisis hormonales. Un descenso aislado en la determinación de cortisol tiene un valor diagnóstico muy limitado debido a la superposición de las concentraciones normales y anormales durante la enfermedad. Los valores de cortisol plasmático son realmente de utilidad después de hacer una manipulación funcional con ACTH o dexametasona.
Las pruebas de detección más comúnmente utilizadas son la estimulación con ACTH y la prueba de supresión con dexametasona en bajas dosis. La relación corticoides urinarios / creatinina también ha demostrado ser de utilidad en descartar la enfermedad o en validar los resultados de las pruebas sanguíneas. Ninguna de estas pruebas es perfecta y todas pueden dar resultados falsos negativos y falsos positivos. Si un perro con signos clínicos compatibles con hiperadrenocortisismo arroja un resultado negativo con una prueba, puede utilizarse otra prueba alternativa. Los resultados positivos pueden también aparecer en perros con enfermedades no suprarrenales, por lo que la combinación de estas pruebas se hace más necesaria en perros que no presentan los signos clásicos de hiperadrenocortisismo.
Los méritos relativos de cada prueba se discuten a continuación. En general, se prefiere utilizar primero la prueba de estimulación con ACTH. y la de supresión con dexametasona en bajas dosis cuando la primera prueba es normal en un perro con signos clínicos de hiperadrenocortisismo.

ESTIMULACIÓN CON ACTH. HIPERADRENOCORTISISMO CANINO



Su ventaja es la de ser la mejor prueba para distinguir el hiperadrenocortisismo espontáneo del iatrogénico. En el hiperadrenocortisismo espontáneo la prueba de estimulación con ACTH pesquisa a aproximadamente del 50 por ciento de los perros con hiperadrenocortisismo suprarrenal-dependiente y al 85 por ciento de los perros con hiperadrenocortisismo hipófisis-dependiente. Es una prueba simple, rápida y documenta claramente la producción excesiva de glucocorticoides en la corteza suprarrenal. La información obtenida también es útil para el monitoreo de la terapia con Mitotano, dependiendo de los criterios para interpretar los resultados de cortisol durante el tratamiento.
Su desventaja es que no siempre es útil para diferenciar hiperadrenocortisismo suprarrenal-dependiente del hipofisiario-dependiente. Un diagnóstico de hiperadrenocortisismo no debe excluirse en el caso de una respuesta de ACTH normal, si los signos clínicos son compatibles con la enfermedad. Ocasionalmente, un animal bajo estrés crónico puede desarrollar cierto grado de hiperplasia suprarrenal, lo que produce una respuesta anormal del ACTH. Esto puede verse, por ejemplo, en casos de diabetes mellitus o piometra.
Se toma una muestra de sangre entre las 8 y 10am, luego se inyecta 0,25mg de ACTH sintético (Synacthen ®) iv o im, se espera una hora para tomar una segunda muestra. De preferencia tomar las muestras en un tubo con heparina (tapa verde), enviarlas refrigeradas al laboratorio.
INTERPRETACIÓN:Se utilizan los valores absolutos de cortisol plasmático pre y post ACTH. Los perros normales suelen tener concentraciones basales de entre 20 y 250 nmol/L de cortisol plasmático (1,5 -8,5 µg/dL) y post ACTH de entre 200 y 450 nmol/L (7,5 a 16,5 µg/dL), independiente de los valores basales. El diagnóstico de hiperadrenocortisismo puede confirmarse mediante la demostración de un valor de cortisol post-ACTH superior a 600 nmol/L (22,0 µg/dL) en perros con signos clínicos compatibles con la enfermedad.

SUPRESION CON DEXA A DOSIS BAJA. HIPERADRENOCORTISISMO CANINO





PRUEBA DE SUPRESIÓN CON DEXAMENTASONA A DOSIS BAJAS
La ventaja de esta prueba es ser la más efectiva en confirmar el hiperadrenocortisismo, ya que los resultados son diagnósticos en todos los perros con la forma adrenal-dependiente y en 90 a 95% de los pacientes con la forma hipofisiario-dependiente. Su desventaja es no ser tan efectiva, como la de estimulación con ACTH, para diagnosticar hiperadrenocortisismo iatrogénico, además puede ser afectada por otras variables y requiere de 8 horas para completarse. No es útil como información pretratamiento o monitoreo de la terapia con mitotano, ni permite diferenciar las formas hipofisiarias de las adrenales de la enfermedad.
Se toma una muestra para medir cortisol basal entre 8 y 10am, luego se inyecta 0,01mg/kg iv de dexametasona, se esperan 3 y 8 horas para tomar nuevas muestras de sangre para los análisis de cortisol.
INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS
Los valores post inyección se relacionan con el valor de cortisol basal. Los perros normales reducen sus concentraciones de cortisol por lo menos el 50% en 3 horas y sus niveles permanecen por debajo de 40nmol/L a las 8h. Los perros con HAC hipofisiario-dependiente suprimen sus niveles de cortisol a las 3 horas, pero se "escapan" a las 8 horas por encima de 40nmol/L. Los perros con un tumor suprarrenal no reducen el cortisol en un 50% a las 3 horas y se mantienen por encima de 40nmol/L a las 8h. Si no se suprime significativamente la concentración plasmática de cortisol en un perro con signos clínicos compatibles, el diagnóstico de hiperadrenocortisismo se confirma.

PRUEBAS COMPLEMENTARIAS. HIPERADRENOCORTISISMO CANINO

RELACIÓN CORTISOL : CREATININA EN ORINA
Esta Relación ha mostrado ser menos laboriosa y más simple que la excreción urinaria de cortisol en 24h (Rijnberk et al., 1988).
Mediante la medición de cortisol en una muestra de orina tomada en la mañana, la concentración de cortisol refleja su liberación durante un período de varias horas durante el sueño, lo que se normaliza las fluctuaciones de las concentraciones de cortisol en plasma. La concentración de cortisol en la orina aumenta directamente con las concentraciones plasmáticas. Al relacionarse las concentraciones de cortisol y de creatinina en la orina, se corrigen las posibles diferencias de cortisol urinario. La muestra debe ser la primera orina de la mañana tomada de preferencia en la casa para evitar condiciones estresantes en el perro. Puede juntarse todo el volumen de micción y llevarlo al laboratorio o tomar una fracción de la orina, previamente mezclada. El valor de esta relación se calcula dividiendo la concentración urinaria de cortisol en µMol/L, por de creatinina en iguales unidades. En perros normales esta relación es menor a 10*106, cuando es mayor, se confirma el diagnóstico en perros con signos clínicos compatibles, nobstante, esta relación también puede verse incrementada en patologías no suprarrenales (Smiley and Peterson 1993). Esta es una prueba muy sensible, pero poco específica para la detección de hiperadrenocortisismo. Es altamente improbable que un paciente con una relación en el rango normal tenga hiperadrenocortisismo, por lo que es útil para descartar HAC. Los valores superiores a 10*106 , generalmente se asocian a las formas hipofisiario-dependientes (Guptill et al., 1997).
17-0H PROGESTERONA
La medición den algunos precursores en la síntesis de cortisol, como la 17-OH Progesterona, puede ser de utilidad en pacientes con signos clínicos compatibles, pero con pruebas de estimulación o supresión normales (Ristic et al., 2002). Las concentraciones de este analito suelen aumentar significativamente durante la prueba de estimulación con ACTH en perros con hiperadrenocortisismo adrenal o hipofisiario-dependiente, no obstante los valores pueden aumentar en enfermedades no suprarrenales, por lo que es recomendable solicitar este análisis sólo cuando exista un alto índice de sospecha de la enfermedad.

FLUJO DIAGNÓSTICO. HIPERADRENOCORTISISMO CANINO



BIBLIOGRAFIA

1.- Cortisol secretion after adrenocorticotrophin (ACTH) and Dexamethasone tests in healthy female and male dogs
Paula Pessina et al.Acta Veterinaria Scandinavica 2009, 51:33doi:10.1186/1751-0147-51-33. http://www.actavetscand.com/content/51/1/33

2.- Diagnostic Testing for Hyperadrenocorticism
Michael E. Herrtage, MA BVSc DVR DVD DSAM MRCVS DipECVIM DipECVDIUniversity of CambridgeCambridge, UK. 27 Congress WSAVA
http://www.vin.com/proceedings/Proceedings.plx?CID=WSAVA2002&PID=2552

3.-Canine Hyperadrenocorticism, Diabetes Mellitus, or Both? Kirsten Zwicker, et al. Class of 2003 (Zwicker), Department of Pathology (Latimer), and Athens Veterinary Diagnostic Laboratory (Rakich), College of Veterinary Medicine, The University of Georgia, Athens, GA 30602-7388
http://www.vet.uga.edu/vpp/clerk/Zwicker/index.php

Thursday, October 08, 2009

CÉLULAS FRACTALES. PARÁSITOS FRACTALES

Trichuris vulpis en fecas de perro (Canis lupus familiaris)

 
Células sanguíneas de Trachemys scripta (tortuga de orejas rojas)



Sarcoptes scabiei en piel de perro (Canis lupus familiaris)


Células sanguíneas de la especie Pogona vitticeps (dragón barbudo)


Cheyletiella spp en piel de perro



Células de Lavado Broncoalveolar Equino, modificadas con el filtro Fractalius


Strongylus vulgaris en material fecal de Equus burchelli (cebra)